El mercado mayorista de la electricidad operará como la bolsa a partir del mes de junio, aceptando ofertas continuamente y a precios diferenciados. Este cambio impulsará la penetración de las energías renovables y facilitará la implantación del negocio de la agregación de demanda, que ya es una realidad en otros países.
El mercado eléctrico -también conocido como pool- casa las ofertas de los generadores con la demanda de los consumidores en varios plazos temporales: el principal es diario, con una subasta, pero luego hay 24 negociaciones intradiarias con mucho menos volumen -el año pasado participó en ellas el 3,4% de la energía- para ajustar las ofertas al consumo en cada una de las horas. Los precios se forman de acuerdo con un procedimiento marginalista: todos los generadores cobran el precio de la oferta más cara que resulta necesaria para cubrir la demanda.