La visión de la Unión Europea de la transición energética, patente en el paquete de medidas publicado como “Energía limpia para todos los europeos” supone un cambio de modelo basado en la eficiencia energética (gestión de la demanda) y en el consumo de renovables. La generación de renovables sí que es capaz de abaratar el precio de la electricidad, a la vez que protege el planeta, cualidades que no poseen el resto de tecnologías. Hacia ahí deberíamos dirigirnos y no tolerar que se interpongan intereses personales por ninguna de las partes. Un ejemplo claro lo tenemos en el día de hoy 20 de Marzo/18: con un precio medio de 38,76 €/MWh, la generación eólica cubre el 42,7% de la demanda de electricidad, y la generación basada en el carbón no ha entrado en el mix, dado que el precio al que están dispuestos a vender electricidad ha quedado por encima del precio de casación entre oferta y demanda.